jueves, 2 de mayo de 2013

Me dijo:
-Por alguna razón cuando estas conmigo, estoy bien, felíz.
-Pero si siempre estoy contigo, siempre estoy en tí- le respondí.
Luego de sonrisas, todo se olvidó.
Y no, nunca me habían roto el corazon, al menos no tan vilmente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

A su alrededor campeaba el otoño y una luz falsa.
Siguió escuchando, en silencio, hasta el final.
No pensaba en nada.
Escuchaba.
Le hizo daño oír, al final, cómo decía en voz baja
-Ni siquiera llegué a oír nunca su voz.
Y al cabo de un momento:
-Es un dolor extraño.
En voz baja.
-Morir de nostalgia por algo que no vivirás nunca.