domingo, 22 de abril de 2018

Grosero


herida narcisista
que di vuelta para no olvidar que amo
nada
cae
perfecto

sutiles palabras irrespetuosas
no concuerdan con la neutralidad apoteósica
que uno debe tener
al
escribir
poemas

aquí uno grosero:

feos;
nos veíamos feos
sin acertijos
sin sinónimos
sin espacios
entre
la
coma

no aguantaba ya ver tu cara
otro día más

y aún así te aparecías
haciendo
que te ame
otra
vez

sí,
hacías que te ame
hacías amarnos
porque,
aunque horrendos
aún así
jugábamos

pero no te lo dije,
claro que no te lo dije
era mucho amor quizás
pensaba:
“tanto que yo
no
lo
merezco”

luego no quise amar
preferí rellenar
mi cuerpo de dolor
mi cuerpo de palabras que no conocía
mi cuerpo de poemas que no entendía
mi cuerpo de víctimas mártires
que prometían no saber amar;

y era verdad, tanto lo amaba que
lo di vuelta todo:
todo de vacíos,
de dolor
de mentiras.

herida narcisista
para olvidar que amo
nada
cae
perfecto
en un poema
horrible

es mejor una cita de sartre



1 comentario:

Anónimo dijo...

He aquí
que una ojeada a la
interrogación misma,
en el momento en que
creíamos
alcanzar la meta,
nos revela de
pronto
que estamos rodeados
de nada.