domingo, 30 de diciembre de 2018

Ceniza blanca



a J.M





maldecías de polvo blanco tus palabras
las maldecías una y otra vez
o quien sabe
quizás la falta de esta ceniza blanca
cubierta en agua amortiguaba
pero aún
aguabas terco el fuego de un dolor
y sin importar qué
lo pensaste una vez
y dos el dos mil dieciséis
ah y antes,
ibas negro de pecho negro, ya no
de niño
respirabas
si reías
sí,  reías atragantado
atragantado de tos
que palpita chueca y debilucha.
Te pensé esa vez en entierro
abajo
un árbol cubre ese fuego
que de fuego a deshecho
bastaron dos años
partir en dos ese bramido marinado en lástima
callar la voz desafiante que repite culpa
sí la habrías callado, sí
o bufado,
relleno de ironías póstumas
de reproches públicos
con las cejas agachadas mirarías
al que por cómplice de ojos gesta
y yo te diría absuelta:
-gringo qué alegría tienes hoy
riamos desgraciados
agotemos las cenizas
un día más maldigamos
un día más
de colmar con dicha nuestro cuerpo que se queja.





No hay comentarios: